egún testigos, siendo las 4.40 aproximadamente, la unidad, Interno 48, transportaba a varios jóvenes que volvían del complejo Copacabana de una fiesta de fin de año, a la altura de la rotonda del kilómetro 6, cuando los jóvenes pasajeros – en evidente estado de ebriedad- procedieron a descender de la unidad, comienzan a romper los vidrios de la puerta trasera de la unidad y a pegar patadas al colectivo.
“Lamentablemente hubo pérdidas en el patrimonio y produce percance en los servicios nocturnos, que habitualmente es requerido por los vecinos pero ocurren estas cosas de inseguridad y de chicos alcoholizados y con excesos” explicó Luis Martínez vocero de la empresa local.
Cabe acotar que por la cantidad de jóvenes en el micro el chofer no identificó a los autores.
El micro fue contratado por la municipalidad para el traslado de alumnos.