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las 11, tal como estaba previsto, el presidente de la Nación Mauricio Macri dio inicio a la sesión que abrió el período legislativo del Congreso Nacional. Lo hizo con un discurso que duró poco menos de una hora, y que se centró en ratificar el rumbo del gobierno. Allí, aseguró que “lo peor ya pasó, ahora vienen los años que vamos a crecer. Los esfuerzos que hemos hecho han dado sus frutos”. Y aseguró que la inflación y la desocupación están bajando.
El Presidente se dirigió de forma directa al pueblo argentino sosteniendo que “me pusieron acá para emprender juntos este camino. Un camino distinto que por fin nos saca de tantos años cometiendo los mismos errores. Un camino de desarrollo donde estamos combatiendo la pobreza”.
Afirmó además que “detrás de cada propuesta y decisiones está la dedicación y el amor con el que he tomado esta tarea. No vine a hacer lo que mejor me conviene a mi o mi gobierno, estoy acá para que ustedes sientan que su vida mejora. Que su vida va a avanzando. Porque venimos a reducir la pobreza y a asegurarnos que ningún argentino pase hambre”.
Se dirigió también a quienes pedían políticas de shock para modificar el rumbo de la economía en el inicio de su mandato. A estos les dijo que la decisión del gradualismo es el camino para combatir la pobreza. También se refirió a “los que querían que nada cambie”, y a estos les respondió haciendo alusión a lo que sucede en Venezuela, pero sin mencionar a ese país de forma directa. “Si nada hubiese cambiado estaríamos como otro país hermano que está en una desintegración social”, afirmó y sentenció que “por eso elegimos el camino del cambio con gradualismo”.
Sobre la inflación y el déficit, afirmó que las meras se van a cumplir y que con el tiempo “se dejará el endeudamiento porque se van a multiplicar las inversiones”.
Allí llamó a todos e invitó “a trabajar juntos en esta agenda” para construir un “Estado al servicio de la gente, moderno y facilitador. Un Estado transparente que muestra como gasta su plata y con funcionarios obligados a tener un alto estándar ético”.
Y sentenció que “después de décadas de desborde llegó el momento de ser serio con el déficit fiscal”.
