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ariano Bareiro, a los 11 minutos del complemento, marcó la conquista que le dio los tres puntos al conjunto de Florencio Varela, al cabo de un aceptable encuentro disputado en el estadio "Libertadores de América", en el cierre de la vigésima cuarta jornada de la Superliga.
Esta nueva victoria le permite a la formación de Vojvoda colocarse en zona de clasificación a la Copa Sudamericana y relegar al "Diablo" en su aspiración por ingresar a la venidera Libertadores.
Los triunfos que consiguieron casi todos sus rivales directos para ingresar al próximo certamen continental más importante, le dieron a este partido un valor superlativo para el dueño de casa.
Los dirigidos por Ariel Holan se ubican en el sexto puesto con 42 unidades, una menos que Huracán, que es el último equipo que se estaría clasificando a la próxima Libertadores.
Plenamente consciente que se encontraba frente a un adversario que suele complicar a cualquiera, el "Rey de Copas" intentó lastimar pero sin desprotegerse en su zaga.
A todo esto el "Halcón" se defendió correctamente haciendo descansar todas sus posibilidades ofensivas en el veloz e influyente Tijanovich, quien "enloqueció" al hoy errático Bustos.
Transcurrida una primera media hora de dominio alternado, los últimos quince minutos de la primera mitad permitieron observar una mejor prestación del anfitrión pero sin la profundidad suficiente como para comprometer al guardavalla Unsain.
El inicio del complemento no ofreció demasiadas variantes pero un yerro de Campaña tras un tiro libre ejecutado desde la izquierda por Pochettino, le otorgó a Bareiro la posibilidad de definir a un metro de la línea de sentencia ante un arquero "Rojo" que quedó en ridículo y manoteando al aire.
Una vez en ventaja el dueño de casa se convirtió en un manojo de nervios ante un elenco de Varela afianzado en su propuesta pero algo más conservador. Al técnico visitante no le tembló el pulso a la hora de reforzar su retaguardia excluyendo a uno de sus mejores valores (Tijanovich) para colocar a Barboza Ullúa, circunstancia que no hizo más que acrecentar la impotencia de un desvaído conjunto de Holan, obstinado entrenador que sigue firme en su postura de colocar a Silvio Romero como volante, con infructuosos resultados a la vista.
La correcta tarea de Unsain las escasas veces que le tocó ser exigido, la regularidad de Cubas y Bareiro en el mediocampo y la solidez que le aportaron los centrales Gissi y Martínez, resultaron una cuesta demasiado empinada para un Independiente que se encuentra en un pronunciado declive en su rendimiento, producto de algunos bajos rendimientos individuales y otras tantas defecciones en algunos de sus nuevos valores, tal es el caso del parsimonioso ecuatoriano Gaibor, muy resistido por la falange local toda vez que logró hacerse del balón.
