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uenas noticias se conocieron desde el Hospital Churruca de Buenos Aires donde permanece internado Hugo Orlando Mereles (33), el gendarme misionero baleado tras enfrentamiento con piratas del asfalto. En el mediodía del viernes el paciente mostró una notable evolución que dejó en lágrimas a su familia, amigos y camaradas que ingresaron a verlo en sala de terapia intensiva; al respecto su padre Juan Arturo Mereles con voz entre cortada de la emoción habló para Pagina Abierta y destacó lo siguiente, “mi felicidad es muy grande, mi hijo se encuentra en buena recuperación, me alivia porque ya no tiene la bala en la cabeza”.
El padre de Hugo comentó a este medio que, “a las doce y media del viernes ingresamos más de doce personas a visitarlo, mi hijo superó su parte médico, familiares, camaradas y amigos les hablamos y él nos agarró muy fuerte de la mano por primera vez a todos los que ingresamos”.
Don Juan Mereles sostuvo que “todos salieron de la sala llorando, riendo, me alivié porque no tiene más la bala en la cabeza, esto me alivia no tiene infección. Con lo que hoy pasó (viernes) es seguro que mi hijo el cien por cien podría recuperarse del todo”.
Explicando la importante evolución, Mereles aseguró que días anteriores estando en coma Hugo solamente lloraba, pero este viernes el panorama fue diferente y alentador para la familia del gendarme ya que el joven de 33 años levantó sus manos y movió las piernas, cuando una de sus tantos colegas que lo visitaron le dijo “quiero verte bien, quiero pelear con alguien ya, necesito que me patees como lo hacías antes”, estas palabras llegaron al oído del valiente misionero y de inmediato acató las palabras de la mujer que luego de vivir el episodio y salir del lugar quebró en llanto y compartió su alegría enviando un audio a un grupo de whatsapp .
Por su parte Juan aseguró que el audio era real y que se trataba de una compañera de trabajo y dijo “cuando supimos que mi hijo movió las piernas y entendió el mensaje todos los que estábamos en el hospital nos emocionamos mucho que no paramos de llorar”. A la vez remarcó que “es impresionante ver todas esas maquinarias, vendas, y mangueras alrededor de mi hijo”, pero celebró “el cuerpo de mi hijo estaba con temperatura normal, ahora tiene un color rosado nuevamente, los días anteriores el cuerpo de él estaba frío”, recordó.
El padre de Hugo Orlando Mereles aseguró que amaneció cuidando a su hijo y que se encuentra de guardia en la puerta de la sala con varios efectivos de Gendarmería nacional, con quienes comparte la guardia las 24 horas. Por último no tuvo palabras para agradecer a la comunidad de Mado-Delicia y de Eldorado por la ayuda y la constante oración por la recuperación de su hijo e insistió en reiteradas veces “que los medios publiquen sólo lo que yo o el hospital Churruca informa, no que se digan cosas que no son, ya que sólo sirve para poner mal a la familia cuando se dan a conocer informes que el hospital o la familia no confirmó”, detalló apuntando además a las publicaciones en las redes sociales.
