Encontranos en:
Nacionales |

CUMBRE

08/08/2018

El C20 reclamó a los líderes del mundo que cumplan sus compromisos

El grupo de afinidad del G20 que reúne al colectivo de ONG exige más espacio en los debates y en la toma de decisiones. Además, en su comunicado final pide que los jefes de Estado transformen en realidad sus declaraciones.

El C20 reclamó a los líderes del mundo que cumplan sus compromisos
L

a sociedad civil no sólo quiere que los 20 países más poderosos del mundo la escuchen sino también que le den más participación; poder debatir mano a mano con el sector financiero y energético; en el mundo laboral y también poder acceder a los mecanismos de control para garantizar la transparencia.

Estos eran los reclamos que se oían ayer en el Palacio San Martín, donde culminó el trabajo del grupo de afinidad C20, que reúne al colectivo de ONG, que se prolongó por más de nueve meses. Con la lectura del comunicado final y con expectativa de que los compromisos, en algunos casos bastante osados del G20 sean de una vez, una realidad y dejen de ser sólo discurso.

"El G20 se comprometió a reducir paulatinamente los subsidios a los combustibles fósiles, sin embargo, no hay fecha límite ni se ve que los países dejen de sostener a las grandes petroleras. Se incluye en la agenda las transiciones energéticas, pero no queda claro cuál será la tecnología para cambiar las matrices energéticas", explicó Enrique Maurtua Konstantinids, de la Fundación Ambiente y Recursos Naturales (Farn) y coordinador del grupo de Clima y Energía del C20 durante un workshop sobre subsidios al petróleo, el gas y el carbón.

Los números que se presentaron allí muestran la situación que se describe: "Países del G20 gastan USD 444.000 millones por año en subsidios a la producción de combustibles fósiles. Y, para el caso de Argentina, en 2017 estos subsidios implicaron un 5,6% del presupuesto nacional y un 3,1% para el 2018, con montos de US$ 9.487 millones a US$ 6.901 millones respectivamente", según los cálculos del think tank Instituto Internacional para el Desarrollo Sustentable (IISD, por sus siglas en inglés) y Farn.

Respecto de la brecha laboral en términos de género, Hector Tajonar de Lara, policy advisor de la OCDE indicó que todavía es alta. Pocos avances. “Hay mucho por hacer hacia la meta: reducir 25%  la brecha para 2025", dijo.

Susana Balbo, chair del grupo de afinidad Women 20 (W20), indicó: "El 40% de las mujeres argentinas vive en zonas rurales o cerca de ellas. Sólo el 25% de ellas recibe salario formal".

María Emilia Berazategui, sherpa del C20 y directora de Instituciones Políticas y Gobierno de Poder Ciudadano, le dijo a Infobae: "El comunicado final contiene un pedido básico: creemos que es tiempo de que los países del G20 comiencen a implementar los compromisos que asumieron en cumbres anteriores. Nos preocupa el bajo nivel de implementación. Compromisos en materia de cambio climático, género, anticorrupción que son muy potentes, pero que no están siendo implementados. En algunos casos es nulo y en otros, escaso el avance que se ve es muy lento".

"El otro pedido central tiene que ver con mayor apertura al proceso de G20. Sabemos que es un foro informal de consenso de los países, pero las decisiones que se toman tienen un impacto más allá. Por eso creemos que la juventud, los empresarios, la ciudadanía, los trabajadores, las mujeres, los científicos, todos estemos al tanto de lo que pasa y podamos hacer nuestro aporte. Para que los líderes no sólo escuchen a otros líderes o asesores sino también a la sociedad civil organizada. Queremos y que haya más apertura, en muchos grupos de trabajo la sociedad civil no puede participar y en los que conseguimos acceso son 5 o 10 minutos y por lo general son los últimos 10 minutos de dos días de negociaciones", ejemplificó.

"Sabemos que no son tiempos fáciles para el multilateralismo, pero no hay otra opción: los problemas compartidos necesitan soluciones compartidas. Por eso instamos a los líderes del G20 a que comuniquen mejor sus debates, adoptar mecanismos sólidos y públicos de rendición de cuentas y comprometerse más con los grupos pertinentes, especialmente con las organizaciones de la sociedad civil", sostiene el communiquè.

"Para poner en práctica la Agenda 2030, el G20 necesita hacer que el crecimiento económico funcione para todos, no para los países en desarrollo o sólo por unos pocos. Eso significa, como ha dicho la presidencia del G20 2018, poner a las personas en el centro de sus preocupaciones políticas", agrega.

Y apela directamente a que hay acción sostenida: "Para que eso funcione, las políticas deben tratar de impulsar un crecimiento inclusivo sin que nadie se quede atrás. Los discursos no son suficientes, se necesita un compromiso genuino a través de la acción".

Las reuniones de los grupos de afinidad continuarán durante todo el año en la Argentina y los líderes del G20 recogerán cada una de las conclusiones de los trabajos. El 30 de noviembre y el 1 de diciembre tendrá lugar en Buenos Aires la cumbre de líderes. Allí se verá el grado de consenso que se pueda conseguir en medio de la guerra comercial de China con los Estados Unidos y si se puede incluir o no en el documento final la adhesión al Acuerdo de París para luchar contra el cambio climático, que Donald Trump abandonó el año pasado. En 2017 esta diferencia hizo que el comunicado final en Hamburgo, Alemania fuera firmado por 19 miembros y no fuera acompañado por los Estados Unidos. Un panorama similar ocurrió en junio pasado, en la reunión anual del G7, en Canadá.

Dejar un comentario