n perro fue rescatado en la noche del martes, por efectivos de la División Bomberos Zona Oeste en el barrio San Miguel, tras recibir el pedido de auxilio de la dueña. Al llegar al lugar, los bomberos notaron que la fosa estaba en desuso y que tenía unos 10 metros de profundidad. En el fondo se encontraba la mascota, visiblemente asustada. Inmediatamente los efectivos armaron un “sillín japonés” y extrajeron del pozo al cachorro que estaba sano y salvo para tranquilidad de su dueña a la que recomendaron tapar y señalizar la existencia del pozo en su casa.