a firma Ford tiene previsto dejar de fabricar estos tres modelos, que caen en ventas, como una forma de ahorrar costes mientras el fabricante pierde dinero a espuertas. Entre abril y junio Ford Europe ha perdido 73 millones de dólares a consecuencia de la incertidumbre por el Brexit, ídem con el motor diésel y una caída generalizada de ventas.
Es más, Ford en Estados Unidos anunció que su gama se convertiría 100 % SUV en 2020, con la salvedad del Mustang y del Ford Focus Active de producción china; este último puede descartarse por la guerra comercial entre el país americano y el asiático. El Ford Fusion, pariente americano del Mondeo, también acabará sus días comercialmente hablando, y eso compromete el futuro de la berlina europea.
Ford ha negado la información periodística del Times, aclarando que actualizará el Mondeo y no dejará de producirlo. Habrá una actualización a finales de año, lo cual se puede corroborar por el desarrollo que se sigue llevando a cabo y que puede verse en fotos espía. El restyling del Mondeo traerá modificaciones en su estética, en sus motores, cajas de cambio y la versión híbrida.
No hay que descartar que tanto el Times como el fabricante tengan razón, al quid de la cuestión es la velocidad a la que se desarrollen los acontecimientos. En otras palabras, puede que Ford deje de fabricar esos tres modelos, pero más adelante, y resulta lógico que, mientras sean viables a nivel comercial y de homologación -hasta Euro 7- se pueden seguir produciendo aunque no se vendan bien.
Lo que Ford tendrá que aclarar es qué modelos van a reemplazar al Mondeo, S-MAX y Galaxy, que forman parte del elenco de modelos que produce la planta valenciana, aunque no son precisamente mayoría. Lo que más sale de la cadena de montaje son los SUV Kuga y las furgonetas Connect -tanto comerciales como mixtas y turismos-. En el primer semestre de este año se produjeron 80.000 Kuga, 56.800 Connect, 29.100 Mondeo, 9.600 S-MAX y 7.300 Galaxy; todas las cifras bajaron respecto a enero-junio de 2017.