sí lo anunció el presidente de Conmebol, Alejandro Domínguez, quien explicó que "ambos clubes pidieron no jugar en lo que fue un pacto de caballeros". Antes, la entidad había anunciado que se iba a disputar de todas maneras. En una tarde de idas y vueltas, que mostró lo más bochornoso del fútbol sudamericano, el partido soñado terminó en pesadilla.
Hinchas de River Plate apedrearon este sábado el micro que trasladaba a los futbolistas de Boca para jugar la final de la Copa Libertadores, por lo que el partido podría suspenderse debido a que varios jugadores quedaron lastimados.
Médicos de la Conmebol revisaron a algunos futbolistas de Boca que resultaron heridos por la rotura de los vidrios y por los gases que lanzó la policía para intentar contener los incidentes con hinchas de River que no tenían entradas.
Este escándalo se da apenas días antes de que líderes de las naciones industrializadas que integran el G20, incluidos Donald Trump y Vladimir Putin, se reúnan en Buenos Aires a apenas unas cuadras de donde se registraron los incidentes.
Según versiones, el transporte de la delegación "xeneize" cambió de recorrido y terminó ingresando por otro sector, por la Av. Monroe, donde estaba repleto de hinchas de River. Allí, el micro sufrió el ataque sin la protección de la seguridad.