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os días pasan, pero la relación interna en la UCR parece estar lejos derecomponerse. El mandatario mendocino, Alfredo Cornejo -quien desde el 10 de diciembre será diputado nacional-, insiste en presidir la bancada del radicalismo, pero aclaró que si eso no sucede no romperá el interbloque de Juntos por el Cambio. En esa línea, pidió que su partido tenga "un rol mucho más protagónico".
El actual gobernador de Mendoza no se da por vencido, a pesar del abierto enfrentamiento con Mario Negri. "Se perdió Córdoba y su capital por una desacertada estrategia electoral: el radicalismo cordobés se presentó dividido y no se quiso participar en una elección interna. En Mendoza competimos en internas y ganamos la elección provincial y la nacional", dijo el mandatario en diálogo con La Nación. "Se perdió Córdoba y su capital por una desacertada estrategia electoral: el radicalismo cordobés se presentó dividido y no se quiso participar en una elección interna. En Mendoza competimos en internas y ganamos la elección provincial y la nacional".
Cornejo dijo que su aspiración de presidir la bancada de la UCR "no es una pretensión personal, como algunos dicen de manera mezquina, típico de un radicalismo que no quiere crecer y no quiere gobernar la Argentina. Es evidente que el radicalismo tiene facciones que quieren imponerse sobre un colectivo que, con una mirada integradora, apuntamos a construir la alternancia en la Argentina con el radicalismo en un rol mucho más protagónico. Ese es mi objetivo".
