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uando los vecinos nos unimos, podemos lograr grandes cosas
Por Hugo KOVALSKI
En vísperas del aniversario 101 de nuestra querida ciudad de Eldorado, quería hacer unas reflexiones sobre nuestro presente, recordando un poco una experiencia que me marcó a muy temprana edad y que fue una de las tantas que me inculcaron los valores del trabajo en conjunto, el compromiso y la solidaridad.
Con mucho optimismo y confiando en nuestra capacidad de gestión, estamos transitando estos nuevos tiempos en Eldorado en que, junto a la dirigencia actual, nos estamos poniendo de acuerdo en redoblar esfuerzos para brindar a la comunidad eldoradense, la gran cantidad de recursos que la gestión provincial siempre está dispuesto a volcar para el desarrollo de nuestra ciudad.
No siempre ha sido fácil coordinar esfuerzos y mancomunar proyectos para volcarlos a la ciudad. Es difícil coordinar las diferentes visiones y objetivos que las dirigencias tienen respecto de la ciudad y la región. Y vemos que eso está cambiando. Soplan nuevos vientos.
Este fin de semana que pasó estuve presente en la puesta en valor de distintas obras en nuestro Hospital SAMIC, uno de los íconos que nuestra ciudad siempre ha mostrado con orgullo a todos los misioneros, clave en el Sistema de Salud provincial para todo el Norte de Misiones.
Me emocionó ver la dedicación y el esfuerzo de los trabajadores de la salud, que luchan día a día para llevar un servicio de calidad y excelencia a toda la ciudadanía, y lo hacen con la firme convicción, heredada de nuestras madres y nuestros padres de, nada más y nada menos, servir a la comunidad en la que vivimos. Mi Comunidad, tu comunidad.
Desde mi experiencia personal, adquirí este valor de servir a la comunidad desde chico, cuando acompañaba a mi padre, Don José “Toto” Kovalski (como cariñosamente lo llaman en el barrio), a cavar zanjas, junto a los vecinos, para dotar de agua potable a todo nuestro barrio, Antiguo Centro. Siempre recuerdo que me decía "cuando los vecinos nos unimos, podemos lograr grandes cosas para el barrio, pero no hay que fallarle a la gente más necesitada que confía". Siempre "peleaba" con Don. Eve Vidal Bruquetas, el que fuera encargado de la vieja A.P.O.S, por conseguir más caños de agua para interconectar a más vecinos, para que todos tuvieran acceso al agua. Luego de varios años me di cuenta que no era una simple “pelea”, era una lucha, un reclamo, por algo que nos pertenecía, el acceso a ese servicio tan vital y esencial que significa contar con agua potable limpia, sana y segura. Su ejemplo de vida forjó en mí esta pasión inclaudicable por brindar siempre mi mejor esfuerzo por mi ciudad, desde el lugar que me toque.
Hoy, desde mi lugar y mi actividad, como Director de la Unidad Regional 5 de Vialidad Provincial, me lleva a realizar distintos trabajos en conjunto con los Municipios, como la demarcación de nuestra emblemática avenida San Martín, y diferentes arreglos, con perspectivas de seguir trabajando, en conjunto, por y para nuestros vecinos.
Cuando andamos trabajando en los barrios y recorriendo caminos, vemos y sentimos que la gente se está involucrando cada vez más, es más participativa, exige con más vehemencia que bajen las soluciones a la realidad en la que vivimos. Que haya más conectividad entre los diversos barrios, que haya vías de comunicación más ágiles, lo que confluye en mayor cercanía entre los vecinos, con el de al lado, cada vez más unidos y con más y mejores posibilidades de intercambiar experiencias y miradas. Y esa participación, esa cercanía entre los vecinos, ese intercambio de experiencias, sentirse acompañados, los unos con los otros en este contexto, nos une, nos obliga a querer mejorar nuestras realidades en conjunto y es ahí cuando esas presiones producen estos resultados, como los trabajos en conjunto entre la Intendencia y Vialidad Provincial, o entre los trabajadores de la salud y los trabajadores de la seguridad.
La sociedad eldoradense, involucrada en el contexto; unida, nos obliga a nosotros, dirigentes y trabajadores públicos, a unirnos, aunar esfuerzos y ofrecer respuestas. Nos obliga a ir acordando y gestionando políticas públicas para nuestra ciudad, sobre las cuales avanzar; sin importar quién esté al frente de la responsabilidad de ser el administrador de la intendencia, y aunque luego estemos enfrentados en las elecciones, porque todos somos parte de la misma ciudad y queremos lo mejor para ella.
