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e acuerdo a lo que afirmaron las autoridades del Banco Central (BCRA), de ahora en más, el ritmo de depreciación diario se adecuará en forma gradual a las necesidades de la coyuntura. En ese marco, el dólar solidario, este viernes, avanzó $2,70. La brecha, en tanto, se ubicó por debajo del 90% frente al CCL y MEP.
Gusto a poco, es la sensación generalizada que dejaron, durante la primera jornada, como resultado, la aplicación de las primeras medidas puestas en marcha, desde el anuncio de ayer. Una regla de oro, en política económica, sostiene que, para ser creíble, siempre debes tener más municiones disponibles. Eso precisamente, parece faltarle al BCRA en estos momentos.
El presidente de la Sociedad Rural Argentina, Daniel Pelegrina, cuestionó la baja temporal de las retenciones anunciada por el Gobierno, calificándolas como una “tomada de pelo”, asegurando que “el campo no va a liquidar los granos”.
“Esto es una tomada de pelo para el sector productor. Acá lo que no hay es confianza, hay una cantidad enorme de dólares en manos de los argentinos, pero lo que no hay es confianza para liquidarlos. Cuando el Gobierno quiere los dólares sale a buscarlos con este tipo de medidas, pero el campo no va a liquidar los granos”, dijo Pelegrina.
“El Gobierno con otros sectores seguramente es más generoso. Esto en el campo va a caer mal, en este momento es una señal contraproducente porque nosotros ya tuvimos un conflicto a principio de año cuando se anunció el aumento de las retenciones y se pidió un cese comercial del granos”, sostuvo.
Durante la tarde, y por diferentes medios, el dirigente rural explicó que “la medida no sirve, ya hemos sacado algunas cuentas y esto trae más trastornos a la transparencia del mercado, genera más distorsiones. Con esto no van a lograr la medida que buscan, el productor se queda con su reserva de valor porque no hay confianza en la moneda, porque no confía en la economía. Pretender, con estos parches, provocar una venta de granos no es el camino”.
Por su parte, el Abogado y consultor en Política Pública, Asesor Federación Agraria y docente universitario, Andrés Domínguez, sostuvo que "Cada 1% de retenciones a soja Planta de semillero son unos 180M U$S al año. La mayoría de los productores vendieron sus granos a los grandes exportadores, al ritmo normal de todos los años- Los Exportadores ya les descontaron un 33% de retenciones. Si se define esta "reducción temporaria" de 3% eso generará una transferencia de recursos, del productor hacia el exportador. Los exportadores tienen unas 18 M tn en stock, sin liquidar. Con este 3% de reducción dejan de pagar 195M de U$S de retenciones al Estado, pero ese dinero ya se lo descontaron a los productores. Es decir no lo pagan por impuestos ni lo devuelven a los productores. Se lo quedan para ellos", explicó.
"La baja 3% temporal no lograra mayores ventas de los productores, porque el incentivo a vender para el hombre de campo es nulo por inflación y expectativa de devaluación. La soja que queda es para pagar alquileres de campo y algo de ahorro, para proteger el valor, hacia la inversión para la próxima siembra. Además, si la reducción de 3% es temporal, la aprovechan solo los exportadores que ahora tienen soja para vender. Los productores volverán a tener muchos granos recién marzo-abril 2021, cuando las retenciones vuelvan al 33%. Redondito el negocio", sostuvo Andrés Domínguez
Por otra parte, comentando la baja temporal de retenciones, sostuvo que "Esta medida ni siquiera es un parche, como varios dicen.
Sería un manotazo de ahogado para agarrase de apenas a un "flota-flota", y de pasada generar ganancias indebidas".
"Ni que hablar que nade se dice de las Economías Regionales y la Lechería, que necesitan desesperadamente un alivio, tienen potencial para crecer, y son, como siempre, las olvidadas de siempre", sostuvo, finalmente el Asesor.
El economista, columnista de CNN radioargentina en Minuto CNN y docente universitario, Roberto Manuel Ortea, comentando por twitter estas medidas, fue contundente, al considerar insuficientes y poco alentadoras el anuncio de este paquetes de medidas económicas, en vistas de la fuerte crisis de credibilidad que enfrenta el Gobierno, basada en la reducción de los diferentes esquemas de retenciones, protección a la industria, sobre todo textil y de cueros, y estímulos a la construcción. Sostuvo que "En materia de recuperación de reservas, la baja de retenciones a la soja parecen, en principio ser inefectivas, en razón que se plantea una mejora de $2,29 pesos por dólar en octubre; $ 1,52 en noviembre; y 0,76 en diciembre; lo que se percibe como insuficiente para liquidar exportaciones", sostuvo.
"En cuanto, a minería e industria, las medidas podrían ser mas efectivas, pero son claramente sectores que aportan menos divisas a las alicaídas arcas del Banco Central", afirmó.
"A su vez, se plantea generar un instrumento linkeado al dólar que promueva el ahorro en pesos. En el mercado existen instrumentos similares, y el ahorrista medio argentino claramente los usa solo marginalmente, por lo cual, el éxito del uso del nuevo bono es dudoso", estima el economista.
"La tercera acción es la posibilidad que el BCRA aumente la tasa de interés de referencia en el corto plazo, cuyo éxito dependerá del tamaño del aumento de la misma. Esta medida sería efectiva, y un cambio en la estrategia del gobierno de baja de tasas, y con efectos en la actividad", analizó Ortea.
"En definitiva, el plan sigue siendo, vamos viendo cómo llegamos a octubre de 2021, y luego, por ahí, implementamos un plan económico, fiscal y monetario. Es decir, el anuncio es mas sarasa, y buenas intenciones, y poco probable que cambie las expectativas del mercado", sostuvo, como conclusión final.
Lo que parece evidente para una serie de economistas consultados es que, hay un problema de confianza y el gobierno, parece responder sólo con medidas coyunturales. No solo por la falta de un plan económico, también por lo que se percibe como la falta de seguridad jurídica que está provocando todo el ruido en torno de instituciones, como pasa con la justicia.
