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El reloj marcaba las 8:15 de la mañana en Washington (13:15 GMT) cuando Donald Trump salió de la Casa Blanca como presidente de Estados Unidos por última vez antes de poner fin a cuatro años de su tumultuoso mandato.
El mandatario dejó de la residencia presidencial acompañado de la primera dama, Melania Trump, para tomar el helicóptero Marine One rumbo a la base aérea Andrews.
Ahí Trump fue saludado con 21 cañonazos, antes de dirigirse a un pequeño grupo de simpatizantes.
En una breve intervención, muy probablemente la última como mandatario, Trump destacó los que considera sus mayores logros como presidente número 45 de EE.UU.
"Tuvimos cuatro años increíbles y logramos mucho", aseguró.
“El haber sido vuestro presidente ha sido el mayor honor y privilegio de mi vida. Siempre lucharé por vosotros. El futuro de este país nunca había sido mejor. Y deseo a la nueva Administración toda la suerte del mundo. De una forma u otra, nos volveremos a encontrar”. "Regresaremos de alguna manera", prometió también, antes de tomar el avión presidencial, Air Force One, rumbo a su residencia de Mar-a-Lago, en Florida.
