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an cerca que estaba la solución. Sí, ahí, en esa magnifica y enorme fruta de corazón rojo, de refrescante dulzor, y tan propia de las altas temperaturas, que por sus propiedades vasodilatadoras debido a su alta concentración de citrulina, tiene efectos similares a los del Viagra, según científicos de la Universidad de Texas (EE UU).
Y no sólo puede convertir en sementales a los hombres de forma esporádica, sino que previene la aparición de la disfunción eréctil, porque relajar los vasos sanguíneos, lo que también beneficia el aumento de la libido en la mujer.
Esto funciona porque al consumir tan delicioso fruto, la citrulina se convierte en arginina en nuestro cuerpo, un aminoácido que mejora la producción de óxido nítrico sirviendo de vasodilatador. Así es como la sangre puede llegar más rápido a nuestros genitales, llenándolos de vida y vigor.
Una manera natural y saludable de recuperar el deseo sexual, muchas veces alicaído por las extenuantes jornadas laborales, o problemas varios, que se contrapone radicalmente a las estúpidas aunque milenarias formas de combatir este problema, como el practicado por la medicina china que dejó un saldo de muerte y extinción total del rinoceronte y que tiene en grave peligro a toda esta especie con sus distintas variaciones, ya que su cuerno tendría la formula milagrosa para la potencia sexual.
En "El sabor de la sandía", del cineasta Tsai Ming-liang, aparece la sandía como un sucedáneo del agua en una fuerte sequía, y aunque su resultado si es sexual, el director muestra imágenes donde el sexo es una de las más tristes actividades humanas, sin embargo con algo de cariño, como con la cocina, todo puede resultar de maravillas.
Pero como siempre en todo esto existe una trampita, la citrulina, se encuentra en mayores concentraciones en la cáscara de la sandía, por lo que se hace más difícil su consumo. Pero ya sabes, cómete la sandía completa, incluso eso blanco que esconde su dulzor por debajo de tus pantalones
