El juez federal de Ushuaia, Federico Calvete, dispuso el secuestro de los 38,800 kilogramos de cannabis sativa que arrojó la requisa total del vehículo.
El chapista aprehendido intentó desligar de la droga a su pareja, incluso hasta remarcó que estando embarazada ella no podía arriesgarse a participar del delito y que él la habría engañado para realizar los poco más de 4.000 kilómetros transportando el cargamento prohibido.
“Es un agravante”
Para el fiscal federal de Tierra del Fuego, Marcelo Rapoport, la condición de embarazada de la misionera “constituye un agravante al delito cometido (…) y habitualmente son utilizadas para que los agentes aduaneros o los gendarmes flexibilicen el control”.
En este caso esto no ocurrió porque el perro alertó de inmediato la presencia de estupefaciente en la camioneta y los uniformados procedieron a desmanterlarlo.
En relación al oficio del eldoradense detenido, para Rapoport que sea chapista complica su situación porque “la droga estaba escondida y el misionero tiene altos conocimientos de como ocultarla. La acondicionó en los laterales y en las ópticas delanteras del rodado, con conductos especialmente armados”.
Agregó también en declaraciones radiales en Tierra del Fuego que “la pareja del chapista no podía desconocer la modificación del auto” y también señaló que hasta el horario en que intentaron ingresar a la provincia, pasadas las 22, “no es fortuito, creían que por la noche los controles son menos rígidos sospechando que los aduaneros y gendarmes están cansados”.
En cuanto la situación judicial de los misioneros, aseguró que seguirán detenidos y prestarán declaración en los próximos días. “Lamentablemente no podemos iniciar el trámite del delito por flagrancia porque no contamos con los elementos tecnológicos aún, por lo que el expediente seguirá su cauce normal”, añadió el fiscal fueguino.
Fuente: Actualidad TDF de Río Grande
