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INCENDIO EN DEPARTAMENTOS DEL KM.8

19/02/2021

Natalia: “si hacían bien su trabajo el fuego no alcanzaba el segundo departamento”

Tras varios días del incendio que desbastó cuatro departamentos en la calle Haidinguer, la propietaria en diálogo exclusivo con Radio STOP, confirmó, que el pasado martes por la intervención de los Bomberos Voluntarios de Eldorado, “hubo insultos, vecinos enojados. Fue un grave error quedarse sin agua, entre otras falencias”, lamentó.

Natalia: “si hacían bien su trabajo el fuego no alcanzaba el segundo departamento”
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uego de varios días del incendio en cuatro departamentos ubicados sobre la calle Haidinguer del km. 8 de nuestra ciudad en la que quedaron familias con tan solo lo puesto, este viernes después de recuperar un poco la cordura, Natalia la mayor damnificado de aquel martes 16 de febrero habló en exclusiva con Radio STOP y detalló aún con mucho dolor, la exposición de los Bomberos Voluntarios de Eldorado de lo que ella misma afirma, “eran chiquitos” tratando de apagar las llamas que se originaron en uno de los departamentos y que de no ser porque el camión se quedó sin agua, quizás hoy las demás familias, inquilinos del lugar podrían contar con un hogar para seguir  viviendo, siguiendo los dichos de la propietaria.

“Hubo varios errores”, explicó Natalia que afortunadamente en años anteriores fue aspirante a bombero voluntario, a pesar de sus conocimientos la desgraciada situación la dejó desbordada pero aun así no desistió de ayudar  arriesgando su vida. La mujer mencionó que,  “corté la energía, Roberto (un conocido y personal interviniente) me comunicó que sentían que las paredes tenían corriente eléctrica, le pregunté  si hicieron el corte de energía y como no lo hicieron  fue así que procedí yo a cortar la energía en el lugar, la línea trifásica seguía dando electricidad así que con la mano derecha logré romper la chapa para poder cortar el suministro”, por tal acción terminó con una lesión en la mano.

Otro detalle que mencionó fue que, “los bomberos estaban abocados a apagar el fuego.  Yo no vivo en Eldorado estaba en un estado de shock y creo que la escalera prestó un vecino. No puedo confirmar quién pero la gente me va diciendo y recordando lo sucedido. Me acuerdo que estuve hasta las 7:15 de la mañana y ayudé a atajar la escalera que se movía mucho, era un peligro”.

“Yo de los nervios agarré una manguera común y comencé apagar el fuego. Fui aspirante a Bombero mí hijo también; había cosas que sí sabía. Hubo cosas que se hicieron mal pero ya no había nada que hacer”, lamentó.  A la vez contó que por el dudoso accionar de los bomberos eldoradenses los vecinos comenzaron a enojarse por la intervención, “hubo insultos, yo trataba de poner paños fríos. Los inquilinos veían el error de los bomberos de Eldorado y lo peor por quedarse sin agua, los vecinos se enojaron y hubo empujones entre bomberos y vecinos. Ya no se podía hacer más nada por lo material, solo velaba por la vida de los chiquitos uno que estaba con una manguera, me daba una pena, qué me voy a poner a pelear soy la mayor damnificada y sabía que ya no había nada para recuperar en lo material”, se acordó.

 

 

“Algo hicieron mal”

Siguiendo con su declaración Natalia indicó que,  “hay cosas que hoy puedo decir que no me cabe en la cabeza cómo un camión puede quedarse sin agua, debían haber pedido refuerzo antes, hay otros municipios que tienen a disposición, sé que los bomberos de Montecarlo están para todos, lo que hicieron mal debe servir de experiencia para que esos errores no se vuelvan a repetir”.

Añadiendo otra falencia en la actuación, dijo, “el fuego se podía haber controlado, el departamento en el que se inició el fuego alrededor de las 2:00 de la madrugada era de un muchacho que se mudó ese día. Yo opté por revisar y dejar como nuevo el lugar, me sorprende lo que sucedió”.

La valiente mujer, señaló que subió la escalera, en medio del peligro que significaba para su vida, ya que se trataba de una escalera sin estabilidad. “Recuerdo que la gente me gritaba para que me bajara pero la desesperación, los nervios por tantos años de sacrificio que se iban en tan solo media hora, me causó indignación porque era una propiedad que adquirí pensando como un bien para mi hijo”.

Con respecto al faltante de agua contó, que fue en ese momento que las llamas se expandían hacia el segundo departamento, “yo sostenía la escalera a unos de los chicos de nombre Roberto. Trataba que tanto los Bomberos y la policía estén bien. Velé por sus vidas”.

Por otro lado, agradeció la contención que uno de los inquilinos de mayor edad le brindó,  “me dijo que me tranquilice que ya no se podía hacer nada. Recién se me cae la ficha siendo un edificio de dos plantas que no hayan llevado la escalera, hablando de un error entre tantos en aquella madrugada. El grave error fue haberse quedado sin agua”, subrayó.

La terrible situación duró un poco más de tres horas, alrededor de las 6 de la mañana con las llamas aparentemente sofocadas, Natalia volvió a ingresar a los departamentos, los recorrió, “no me quede tranquila subí a recorrer el lugar creí que con suficiente agua que tiraron (trabajó dos dotaciones de Eldorado y uno de Montecarlo pero sin personal de refuerzo ya no que no solicitaron de la Asociación) las llamas se apagaron  pero no fue así porque el foco ígneo comenzó a surgir otra vez por lo que tuve que llamar otra vez al cuartel”, de esta manera la tareas volvieron a realizarse y fue hasta las 7 de la mañana.

Por otra parte cabe mencionar que desde la Asociación de Bomberos Voluntarios se emitió una ratificación de los hechos por dichos maliciosos de un medio de comunicación de la zona oeste, y confirmaron que la propietaria de los alquileres les brindó “el reconocimiento y agradecimiento por la presencia y labor realizada por los Bomberos Voluntarios de Eldorado”, pero ante tal mención Natalia sostuvo, “agradecí a los Bomberos a pesar de todas las falencias que hubo porque expusieron su vida al peligro. Ellos tocaban las paredes y la energía corría por las paredes”.

En esa oportunidad agregó, “creo que si los bomberos tocan la sirena, también la CEEL  debía tener un poco de solidaridad y acercarse para dar una mano en estos casos”.

Por último, una vez más aportó su ayuda a las familias que sufrieron el siniestro, “soy una persona que tengo mis errores como cualquier ser humano siempre preste mis conocimientos a quien lo necesite. Trato de ayudar. Ahora pido colaboración por las familias que se quedaron en la calle. Yo tengo un lugar para dormir pero ellos ahora no, a pesar del daño psicológico que me queda yo me puedo recuperar. Las dos familias son las que más necesitan. Yo los llamó cada vez que puedo les ofrecí dos departamentos abajo que son los que me quedan, les pedí una semana para ponerlo en condiciones y vuelvan habitar el lugar, me comprometí para que por lo menos seis meses puedan tener una base y volver a empezar”, culminó.

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