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l caso de Antonella, la nena de 4 años a la que una jueza de Familia de Eldorado primero sacó del seno de la familia del corazón para entregarla en adopción a una pareja de Posadas, en un operativo escandaloso, con tironeos, llanto y gritos, está a un paso de llegar a un final feliz. El matrimonio que la crió desde bebé, a la que le reintegraron a la chiquita después del bochornoso operativo, está por conseguir la adopción plena.
“La Cámara interviniente aprobó excepcionalmente muy rápido la guarda con fines de adopción. Gracias a eso en un corto tiempo presentamos el pedido de adopción plena”, contó la abogada Sandra Olcese, que representa a la familia Narciso.
La letrada admitió que “nos generó preocupación el estado psicólogico que generó en la niña la situación traumática que vivió cuando la llevaron a Posadas. Tanto ella como la familia iniciaron un tratamiento”.
Con respecto al trámite en curso, precisó que “ya se expidieron el defensor oficial y la fiscal. Es inminente el fallo de adopción”.
“La figura jurídica de la adopción viene siendo bastante maltratada. Hay que entender lo que está prescripto en el Código Civil con respecto al interés superior del niño y del adolescente. Son muy pocos los que ven a los chicos como tales sino que se circunscriben en los fallos a la fría letra de la ley sin incorporar al ser humano”, opinó Olcese y cuestionó que “se tarda muchísimo en resolver qué hacer”.
La abogada consideró a la familia Narciso “muy valiente” y destacó el hecho de que “nunca mintió”.
El caso de la niña tomó repercusión en distintos medios, incluso nacionales y generó un fuerte respalfo al accionar del Juzgado de Familia, ubicado sobre la calle Dinamarca. En reiteradas oportunidades los padres del corazón de “Anto” se apersonaron con pancartas e incluso se encadenaron frente al edificio.
La sociedad eldoradense también le brindó un fuerte respaldo a la familia acompañando en diferentes marchas realizadas.
