n las últimas horas, el Club San Cirano hizo pública su "indignación" por el comportamiento de Julián Cirigliano, el rugbier que empujó a un indigente y escapó junto a sus amigos. Sin embargo, la sanción de la institución despertó polémica en las redes sociales
El joven y sus compañeros serán suspendidos y deberán realizar "tareas comunitarias", pero lo cierto es queel club ya venía realizando estas actividades con anterioridad, por lo que no supone un castigo real.
Obviamente, para la gran mayoría de la opinión pública, ésta sanción no representa una medida ejemplarcontra una actitud tan despreciable. "Una persona con tan pocos valores, no puede jugar a un deporte tan honesto como el rugby. Que este pibe y sus amigos, no jueguen NUNCA más", había manifestado el joven que hizo público el video del escándalo.