El embajador argentino en Estados Unidos, Martín Lousteau, afirmó hoy que es "inminente" que la administración encabezada por el presidente estadounidense Barack Obama disponga lareapertura del mercado de su país para los limones argentinos. El funcionario anunció en las redes sociales que las autoridades estadounidenses ya estarían "levantando trabas a nuestras exportaciones"
También señaló que "luego de 15 años sin poder exportar este producto a los Estados Unidos, se podrá exportar a uno de los principales mercados del planeta". La Argentina es el principal productor de limón en el mundo y la provincia de Tucumán lidera esa producción con 1,3 millón de toneladas anuales, lo que permitiría concretar nuevamente ventas anuales por unos U$S 600 millones.
La posibilidad de colocar limones locales en Estados Unidos se frenó en el 2000, cuando un lobby de productores de California advirtió que los cítricos argentinos no eran inocuos en términos fitosanitarios y, tras un fallo judicial, logró que se trabara su venta e ingreso.
La revisión de este impedimento le fue presentada a Obama en su reciente visita a la Argentina, hecho que motivó un gestión ante el Departamento de Agricultura estadounidense (USDA).
En 2011, Cristina se disertó en una reunión de la Unión Industrial Argentina y fiel a su estilo recordó y reiteró un reclamo que le hizo a Obama. En esa oportunidad se preguntó "¿Cómo puede ser que Estados Unidos, al que le estamos comprando valor agregado, no nos deje entrar los limones? ¿Le vendemos los limones a Coca Cola y nos ponen barrerasfitosanitarias a nuestros limones? Se sonrió el presidente (Obama) cuando le dije esto, se ve que entendió, afortunadamente".
Para refutar la posibilidad de que los limones argentinos pudieran transmitir una bacteria, la Argentina realizó en los últimos años una serie de presentaciones en distintos foros internacionales, incluso ante la Organización Mundial del Comercio (OMC).
Con este objeto, a las autoridades sanitarias de Estados Unidos se les remitió un trabajo científico que demuestra la condición del limón argentino como no hospedante de Clorosis Variegada de los Citrus (CVC).