E
l apoyo opositor al proyecto para pagarles a los fondos buitre fue mayor al esperado. Al menos, resultó superior a los números públicos que manejaba el propio interbloque de Cambiemos.
Un primer repaso numérico: de los 165 votos a favor, "sólo" 88 fueron oficialistas (todos menos el del presidente del cuerpo, Emilio Monzó, cuyó apoyo no fue necesario). Es decir, hubo 77 acompañamientos externos.
Pero de ese enorme grupo, lo que más llamó la atención fue media docena de diputados vinculados al kirchnerismo.
“Fue una decisión política de corte bien misionerista"
El diputado nacional Maurice Closs votó a favor de la derogación de las leyes Cerrojo y de Pago Soberano “entendiendo que era lo mejor para Misiones”.
El legislador misionero, junto a los demás diputados renovadores, se diferenció del bloque del Frente para la Victoria con el argumento de que las leyes son necesarias para dar gobernabilidad al Presidente de la Nación.
“En una decisión que no ha sido fácil, hemos votado a favor, acompañando y entendiendo que esto era lo mejor para Misiones. Es una decisión distinta a la del bloque, pero tiene que ver con la pertenencia y priorizar un proyecto provincial y las cosas que pueden ser buenas para Misiones”, indicó Closs.
“Fue una decisión política de corte bien misionerista y hay un enorme respeto a los que eligieron otro camino. No se puede hablar de ruptura. Pero cuando hubo que pagar al club de París o al FMI, tampoco dudamos. Esto es coherencia”, recordó el ex gobernador.
El diputado insistió en que las leyes derogadas sirven para “darle gobernabilidad a Mauricio Macri con las diferencias que tenemos”.
”Hay que atender esto para el acceso al crédito y las inversiones que están paradas por esta situación irregular, y que se destraben de una vez por todas. El pedido de gobernabilidad que hace el titular del Ejecutivo hay que acompañarlo. Por eso dimos quórum y acompañamos”, agregó Closs.
“No es una ley brillante, no nos va a mejorar la vida y no hay que festejar. Es una herramienta para cumplir una sentencia, que te podrá gustar o no, sentencia injusta, buitres carroñeros, pero es la jurisdicción que aceptamos litigar. Hay que arreglar si queremos volver a tomar créditos más económicos y cubrir vencimientos que tenemos. La deuda se fue pagando con reservas y las reservas no están más”, analizó.
De todos modos, Closs anticipó que “no hay certezas de que no habrá litigios”, ya que “en el ámbito del derecho, cualquiera puede reclamar”.
“Es una ley fea que implica aceptar una derrota judicial. En lo personal creo que se va a aclarar mucho, cuando se vea como vota el Senado. Si rebota esto, complica la situación del país en forma compleja. No es la muerte ni la hiperinflación o el ajuste que nos dice Macri, porque ya lo está haciendo. Hay que esperar al Senado y ahí se va a entender cuál fue la lógica de nuestro voto”, enfatizó.
Closs destacó que el candidato presidencial del Frente para la Victoria, Daniel Scioli, también pretendía llegar a un acuerdo para arreglar la deuda, aunque reconoció que “quizás no hubiera sido tan rápido” ni con “tanta ansiedad temporal”.
