Las autoridades presumen que se trata de una mujer de 28 años que sufría de una enfermedad mental, que fue declarada desaparecida durante seis semanas en 1976 antes de ser encontraba en un bosque.
En esta línea, los registros indican que volvió a desaparecer en 1977 a unos cinco kilómetros de la mencionada vivienda.
La Policía no tiene sospechosos de la muerte de la mujer, ya que, según ha declarado el portavoz, Josef Schade, "suponemos que se echó a dormir y murió de frío". Según los datos disponibles, estuvo casada y tuvo tres hijos. Se sabe que su esposo murió en 2012. El hombre, que descubrió el cadáver en el ático, estima que fue el primero en entrar en la casa en cuatro décadas.