la semifinal del Mundial de Clubes entre Atlético Nacional de Medellín y Kashima Antlers, de Japón, se cobró el primer penal sancionado con el uso de la tecnología. El árbitro húngaro Viktor Kassai se acercó para ver la jugada en una pantalla ubicada al costado de la cancha.
Observó las repeticiones tantas veces como lo creyó necesario. Tres minutos después llegó a una conclusión: fue penal. El colombiano Orlando Berrío enganchó al japonés Daigo Nishi. Shoma Doi se encargó de convertir el tanto.