Lionel Messi, al "banquillo". La "Pulga", que partió de Rosario hacia España el lunes, se acercó al juzgado de Barcelona esta mañana para explicar "sus manejos de dinero" ante la Audiencia de Barcelona. Pero se encontró con un racimo inesperado de insultos.
El argentino, que está imputado por supuesta evasión de 4,1 millones de euros generados por derechos de imagen, pensó que los problemas iban a comenzar dentro del edificio público, pero no, los inconvenientes empezaron en la puerta del recinto.
Un grupo de españoles se acercaron al edificio e insultaron a Messi. "Ve a jugar a Panamá, cabrón", fue una de las tantas cosas que largaron al aire los presentes.
Como de costumbre, el jugador de la selección Argentina hizo "oídos sordos" y no reaccionó ante las descalificaciones.
El astro del Barcelona se presentó esta mañana, alrededor de las 6, junto a su padre Jorge en los juzgados de la capital catalana para declarar en el juicio por la presunta evasión fiscal de la que están acusados en España.
La presunta evasión fue generada de los ingresos que Messi ganó con la explotación de sus derechos de imagen entre 2007 y 2009 por los que no tributó y que facturó algo más de 10 millones de euros.
La Fiscalía no acusa al futbolista ya que considera que no tenía conocimiento ni intervino en el fraude. El problema lo tiene su padre, a quien se le atribuye toda la responsabilidad. Puede tener una pena de 18 meses de prisión.
La defensa intenta demostrar que ni Messi ni Jorge sabían que estaban cometiendo fraude y que siempre actuaron bajo las indicaciones de sus asesores.