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os hermanos de una comunidad amish que admitieron haber tenido relaciones sexuales con su hermana de 13 años y haberla dejado embarazada evitaron la prisión porque un fiscal estadounidense consideró que "habrían sido devorados vivos en el sistema penitenciario estatal", según informó el pasado miércoles el periódico Webster County Citizen.
Los hechos, que ocurrieron cerca de la ciudad de Seymour, en el estado de Misuri, salieron a la luz el 6 de junio después de que un médico alertara a las autoridades tras observar que una niña de 13 años estaba embarazada. La menor, por su parte, afirmó haber tenido relaciones sexuales con cuatro de sus hermanos, dos de los cuales también eran menores de edad.
Los dos hermanos mayores, Aaron Schwartz, de 22 años, y Petie Schwartz, de 18, declararon que comenzaron a tener relaciones sexuales con la niña cuando esta tenía solo 12 años y que estas relaciones se repitieron en al menos seis ocasiones con cada uno de ellos. El fiscal del condado de Webster, Ben Berkstresser, informó que la joven dio a luz hace unas semanas y "uno de los hermanos es el padre del niño".
Inicialmente, Aaron y Petie Schwartz fueron acusados de seis cargos de estupro y un cargo de incesto, los cuales luego fueron reducidos a dos cargos de abuso de menores en tercer grado. No obstante, los dos llegaron a un acuerdo con la Fiscalía, que preveía 15 años de prisión para cada uno con una ejecución suspendida de la sentencia, lo que significa que los hermanos lograron evitar la cárcel.
En particular, el fiscal insistió en que era una "relación diferente" a la de un "padre en una posición de autoridad que abusó o explotó sexualmente a su hijo".
Berkstresser señaló que Aaron y Petie Schwartz eran "muy inmaduros en comparación con otros jóvenes de la misma edad", por lo que "habrían sido devorados vivos en el sistema penitenciario estatal".
