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l doble crimen fue presenciado por otro hijo de Gabriela, Rafael Alejandro (20), quien incluso llegó a forcejear con el femicida y logró arrebatarle el arma pero no pudo evitar que huyera en su camioneta Fiat Toro azul.
El comerciante Sergio Kozak (38) está prófugo.
Una versión que la Policía intenta corroborar indica que Kozak había estado con las víctimas en un bar de una localidad cercana. Poco antes de las 4, Agüero y sus dos hijos se retiraron del lugar en un remís Volkswagen Gol rojo y bajaron sobre la avenida Andresito, en el barrio Nueva Esperanza de San Antonio.
En esas circunstancias, Kozak arribó en su camioneta y primero intentó atropellar a Gabriela, pero como no logró su objetivo, sacó un arma de fuego y por la ventanilla realizó varios disparos que impactaron en su novia y la madre. Ambas murieron antes de recibir asistencia médica.
Después del doble crimen, el comerciante huyó y abandonó su camioneta en la zona rural de San Antonio.
Rafael, hermano de Débora, alcanzó a forcejear con el femicida e intentó detenerlo, pero sólo alcanzó a quitarle el revólver usado en el hecho. El arma quedó sobre la vereda, a pocos metros de los cuerpos.
El femicida huyó a toda velocidad hacia el acceso de la localidad. Esta mañana, cerca de las 9, la Policía halló su camioneta abandonada en una chacra que había adquirido recientemente. El vehículo estaba con las puertas cerradas con llave.
Fuentes vinculadas a la causa dijeron que Débora había conocido a Kozak cuando éste la contrató para trabajar en su telecentro. Fue allí que iniciaron una relación amorosa que ahora terminó en un baño de sangre.
La camioneta en la que huyó el femicida.
Fuente: Clarín con redacción propia
