Un verdadero viaje de terror protagonizaron 48 pasajeros que partieron desde Santiago de Chile con destino a Asunción (Paraguay) cuando la aeronave atravesó la fuerte tormenta que se estaba desarrollando en la capital guaraní.
Un verdadero viaje de terror protagonizaron 48 pasajeros que partieron desde Santiago de Chile con destino a Asunción (Paraguay) cuando la aeronave atravesó la fuerte tormenta que se estaba desarrollando en la capital guaraní.
De acuerdo a la información que brindan medios paraguayos, el avión debía aterrizar en el aeropuerto de Luque (localidad pegada a Asunción) sin embargo fue desviado por las condiciones climáticas y llegó a Foz do Iguazú (Brasil).
Tras un par de horas, la aeronave emprendió el viaje hacia la capital paraguaya y se enfrentó con la tormenta. Mientras se investigan las razones de esta decisión, se confirmó que el avión llegó con un motor menos, el parabrisas roto y la "nariz" destruida.
Uno de los 48 pasajeros a bordo tomó su teléfono celular y captó algunos momentos de las fuertes turbulencias que debieron soportar cuando el avión atravesaba la tormenta.
La conocida ex modelo Pabla Thomen se encontraba en el avión y, entre lágrimas, relató la difícil experiencia que vivió con su hija de 2 años y los demás ocupantes. Señaló que, pese a las horas que ya transcurrieron del aterrizaje, recién ahora está asimilando todo lo ocurrido.
Explicó que a 30 minutos de llegar a Asunción comenzaron a sentir las fuertes turbulencias, por lo que decidieron aterrizar en Foz de Yguazú, donde no pudieron bajar porque no se encontraba ninguna autoridad para recibirlos.
“No podíamos tocar tierra brasileña porque no estaba la Policía, Migraciones, nadie; abrieron por lo menos la puerta del avión para que entre un poco de viento, me coloqué ahí con mi hija, ahí estuvimos dos horas”, relató.
No obstante, manifestó que varios pasajeros decidieron bajar en el vecino país, debido a que ya no aguantaron el estrés del momento, mientras que ella tomó la decisión de seguir en el vuelo porque quería llegar a Asunción.
Posteriormente, cuando ya estaban de nuevo cerca de la capital del país, comenzaron a percibir turbulencias más fuertes, las personas comenzaron a entrar en pánico y se les avisó de un aterrizaje forzoso.
“El piloto nos dice que nos preparemos para un aterrizaje forzoso. Después nos dice la azafata en el alta voz que nos preparáramos en posición de impacto. Ahí le abracé a mi hija, pero se me desabrochó el cinturón de seguridad y comencé a pedir socorro, gracias a Dios, un hombre se apiadó de nosotras y me ayudó”, expresó.
En ese momento, la menor abrazó y se aferró al desconocido por el susto, mientras que Thomen comenzó a vomitar de los nervios, lamentó.
“Ahí pienso qué hago para proteger a mi hija, pero gracias a Dios nunca llegó ese impacto y aterrizamos, chocamos con algo, pero en ese momento comenzó a bajar la velocidad”, finalizó su relato entre llantos.