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l tiempo que Kiev sigue bajo el toque de queda, el gobierno de Ucrania señaló que recuperó un suburbio clave a 60 kilómetros de la capital. Las tropas rusas mantiene el asedio a la ciudad portuaria de Mariupol y se registró un intenso bombardeo en Járkov.
RADIO STOP dialogó nuevamente con Uli Vetter, oriundo de Eldorado residiendo en Alemania quién habló sobre varios puntos de la invasión: “Quiero hacer enfoque a la catástrofe humanitaria, hay alrededor de 10 millones de personas fugitivas, 3.5 millones que salieron de Ucrania. Hay personas que perdieron su casa, documentos, entorno social, familiares, han perdido todo. Muchos de los que vienen, vienen con lo puesto y es terrible esa imagen”.
Hizo mención de la situación de Mariupol “es un infierno. Cientos de miles de personas sin agua ni comida. Hospitales atacados. Las calles ya no son calles, sólo médanos de escombros. Fosas comunes abiertas y rebalsadas. Cadáveres que ya no son levantados por nadie”.
Y continuó “las fuerzas militares dijeron que si se entregan los dejarían salir, los ucranianos se negaron, para tomar esa ciudad van a tener que matar a todos, no les queda otra. Es una ciudad de mucho prestigio y la necesitan para completar el puente terrestre entre Rusia y la península primera. Harán todo lo posible para conseguir otra ciudad. Ayer empezaron a bombardear otra ciudad en la costa del mar negro, buscan aislar a ucrania del mar negro”.
Sobre un posible acuerdo entre el gobierno ruso con el ucraniano, sostuvo “yo a los rusos no les creo, siguen escalando esta guerra, el hecho que hayan empezado a usar misiles hipersónicos hacia OTAN hace de que tengan algo entre las mangas para escalar este conflicto, pienso que hasta este momento los rusos no están dispuestos a negociar un cese del fuego”.
La localidad de Kiev sigue bajo el toque de queda ordenado por sus autoridades. El gobierno de Ucrania confirmó que sus fuerzas militares recuperaron un suburbio clave a 60 kilómetros de la capital, mientras en el sur del país las tropas rusas mantiene el asedio a la ciudad portuaria de Mariupol. Zelenski rechazó entregar esta localidad a cambio de la salida segura de civiles: “ayer hubo un ataque muy grande a un centro comercial cerca del microcentro, no quedo nada de ese lugar. Después de ese ataque se estableció toque de queda hasta mañana a la mañana porque los ucranianos están a la espera de más ataque de misiles”.
Por otra parte, el servicio ucraniano de contrainteligencia militar detuvo una célula dirigida por un agente del FSB ruso, El grupo, compuesto por unos 25 individuos, pretendía viajar a Kiev haciéndose pasar por una unidad de la defensa territorial.
En la vereda de en frente, organismos de inteligencia ucranianos afirman que miembros del Kremlin están conspirando para eliminar a Vladimir Putin envenenándolo y ya tendrían seleccionado un sucesor.
Más de 3,5 millones de personas huyeron de Ucrania desde el inicio de la invasión rusa el 24 de febrero, según un último recuento de la ONU publicado este martes. El informe aclara que alrededor del 90 por ciento son mujeres y niños: “nosotros nos hemos inscriptos en una plataforma para ser voluntarios y recibir a refugiados. Estamos esperando a una mujer y su hijo que en las próximas horas llegarán” contó Vetter.
Ante la probabilidad de que se desate una guerra nuclear, varias familias en Alemania planean salir del país: “Muchos están pensando en ir a varios países, entre ellas Argentina. En mi caso, si esto avanza hacia Alemania decidí defender a nuestra forma de vida hasta la última consecuencia. Mi esposa hasta el momento también decidió quedarse”.
Por su parte, señaló que “Rusia está acabando poco a poco con Ucrania llevándose vidas inocentes, dejando solamente cenizas en las que fueron grandes ciudades. Esperemos que pronto termine este caos”.
