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in dudas el efecto electoral golpeó fuerte al mercado automotor en la República Argentina. La decisión del Gobierno de devaluar el peso en la mañana del lunes paralizó inmediatamente las operaciones en el sector. Desde varias terminales comunicaron a su red de concesionarias que se suspendía la facturación hasta que se decidiera la política comercial a seguir. Stellantis, Ford y Volkswagen fueron las que más rápido reaccionaron a la suba del dólar en el país. En otras marcas se siguió operando con los vehículos que estaban asignados, pero no se tomaron nuevos pedidos.
Se espera que en las próximas horas lleguen las nuevas listas de precios con aumentos que se estiman entre 13% y 15% para los 0km que expresan su cotización en pesos. Este incremento se suma al ajuste que ya tuvieron los autos, a comienzos de mes, como consecuencia del recargo impositivo de 7,5% que se aplica sobre la importación de 0km y piezas.
El 40% del mercado se abastece con modelos que llegan del exterior, mientras que los nacionales sienten el impacto de un encarecimiento de los insumos importados, que representan alrededor del 60% de las piezas que se utilizan para la fabricación.
Entre las dos actualizaciones de precios, los 0km acumularán una suba cercana al 30% comparado con los valores de julio. En el caso de los vehículos que se venden en dólares billete, se siguió operando aunque no se hicieron demasiadas operaciones ante la incertidumbre económica.
Con este panorama, desde las concesionarias y las fábricas estiman que el mes tendrá un volumen de operaciones menor al estimado.
En julio se patentaron cerca de 44.000 unidades. Para agosto, se esperaba un mercado de 36.000 debido al recargo impositivo. Ahora, las proyecciones son menos optimistas y se señala que estará por debajo de 35.000. La suba de precios va a frenar la demanda, pero también los vendedores cuidarán sus stocks ante la incertidumbre de los precios de reposición.
La situación en Eldorado
“No sabemos hasta dónde va a seguir esta incertidumbre y cada empresa decidirá qué hacer para cuidar su patrimonio. Al no tener un precio cierto, no sabemos a cuánto vamos a reponer. Por ese, es mejor operar con cautela, está para agarrar la caña e ir a pescar una semana, bajar la persiana y ver que pasa” explicó el empresario Carlos Lowe en declaraciones a RADIO STOP.
Si bien explicó que las ventas no se detienen ya que continúan con la venta de unidades y planes de ahorro sostuvo que hay que actuar con cautela. “No detenemos la venta pero si algo nos vamos a resguardar por la devaluación que se trasladará a los precios. Ayer (en referencia al lunes 14) nos llamaron desde Ford para decirnos que sigamos vendiendo tranquilos que no aumentaron los precios pero que a fin de mes habrá un ajuste, entonces decís si hoy vendo 10 camionetas es genial pero a fin de mes cuando voy a querer comprar 10 para reponerlas podré comprar 9 entonces no las vendo y mantengo las unidades”.
Informó que en breve Volkswagen le enviará un nuevo listado de precios con una suba del 15% de piso. "Esto hoy en día es mucho dinero, una camioneta vale 20 millones y con este incremento serían unos 3 millones. Aún así destacó que continúan las ventas ya que las personas no pretenden quedarse con el peso en mano. Citó como ejemplo que los productores al cobrar por sus labores la invierten en unidades. "Lo que es producción la invierten, la demanda sigue el que cobró los pinos, cobró la yerba o vendió 30 cavas se compra una camioneta. Nadie se queda con el dinero porque a la gente le quema la plata en la mano. La falta de financiación es el problema porque los bancos subieron las tasas de financiación que se hace inviable un redito a 48 meses".
Lowe hizo referencia a la situación de la importación que afecta a la industria tanto por la llegada de las unidades como por la reposición de piezas o repuestos. "Con el auto importado en cuanto a la entrega hay problemas porque el Banco Central no tiene medio dólar y es el que tiene que girar el dinero para que las terminales puedan comprar autos. Hace dos meses no entran importados de Brasil y ahora los repuestos y piezas se vuelve difícil de conseguir, hoy los clientes vienen a que se les arregle el auto y se dificulta porque no hay repuestos. La demanda sigue pero bajó bastante a lo que eran antes o aumentó la oferta. Antes por ejemplo una camioneta Amarok había que esperar tres meses a que llegue y hoy la tenés en el salón en el color que quieras" agregó.
En referencia al mercado de los usados el empresario dijo que se mueve bastante pero que también sufrirán incrementos porque van de la mano a los 0 km. "Hoy un usado está caro, encima no tiene financiación".
Para finalizar sugirió que aquel que cuente con dinero lo invierte en un vehíuclo. "El dinero no se lo debe guardar porque el mes próximo pierde validez". A modo de ejempló citó que una Ranger Límite modelo 2014 cuesta 9 millones de pesos y hace un año valia 4 millones. Si guardaste la plata no compras hoy el 40% del auto".
El mes pasado no ingreso un solo auto importado.
