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lexander Figueredo, un pequeño de tres años que vivía en Eldorado,en el mes de enero fue llevado por su madre Fernanda Fidelina a la localidad de Bom Jesus do Sul, Brasil donde la mujer vivía con su pareja, oriundo de dicho país.
Su desaparición conmovió a toda la familia ya que repentinamente la mujer se llevo al pequeño y no tenían información de ellos. Por muchos meses, sus familiares lo buscaron por los distintos domicilios que ella decía, sin embargo no encontraban rastros de ellos.
La abuela paterna, Gloria García en diálogo con RADIO STOP, contó que reclamaba constantemente a Fernanda Fidelina información sobre donde se encontraban: lugar que ella decía que estaban, Gloria iba pero nunca los hallaba. Preocupados por la salud del pequeño y la misteriosa forma de actuar de su madre crecía la incertidumbre pero jamas imaginaron que esa tarde de domingo el niño dejó de existir tras una brutal golpiza.
Al enterarse que Alexander se “había caído de la cama provocandole una fuerte lesión que llevó a su muerte” Gloria sintió como su corazón fue desgarrado. Su nieto que tanto amaba, su compañero, ya no iba a estar más.
Pero por la gravedad de las lesiones, para los médicos del Hospital Municipal de Dionísio Cerqueira no fue un accidente doméstico. El certificado de defunción confirmó que Alexander fue brutalmente golpeado.
Inmediatamente la Policia detuvo a la madre del niño y su pareja como principales sospechosos aunque estos manifestaban no haberlo hecho nada. Finalmente confesaron el crimen: el pequeño habría estado jugando con productos tóxicos y el padrastro al verlo se pusio violento y comenzó a golpearlo tanto que provocó series lesiones al niño. Ambos se encuentran detenidos en la localidad de Barracao.
La madre de Fernanda, al tomar conocimiento que su hija es principal sospechosa junto a su pareja del asesinato de su nieto, sostuvo en un audio de WhatsApp que su mundo se vino abajo: su nieto fallecido y su hija imputada al crimen. La calificó como una persona violenta pero jamás imaginó que podría llegar a hacerle eso a su propio hijo.
El Ministerio Público de Paraná, caratuló el crimen como "Homicidio Calificado y Tortura" donde Fernanda y su pareja podrian recibir una pena de 40 años de prisión.
Por su parte, la familia del pequeño busca repatriarl el cuerpo a la localidad de Eldorado, un procedimiento complejo y costoso.
